Y que me Motivo a dar ese cambio en la Vida?

Al igual que al 90 % de la población, crecí escuchando que debes estudiar, ir a la universidad, obtener un título y conseguir un buen trabajo.... Y bajo este esquema me gradué de Ingeniera de Gas.

Con gran expectativa y entusiasmo salí al campo laboral, inmediatamente ingrese a lo que se creía en ese momento una de las mejores empresas del País.

Lo logre!. El trabajo deseado…

Sin embargo, al pasar el tiempo sentía que eso no era para mí.

Solo cuando escuchaba los comentarios de las personas que ya planificaban su jubilación, me parecía de terror!.

Ellos se referían a: tengo 30 años aquí, me falta tanto; o tengo que llegar a los casi 40 años para tratar de salir con el 100% de mi sueldo. Y si salgo con el 100% tampoco me alcanza. Que voy hacer al retirarme?. Esto me parecía abrumador.

Siempre me repetía, en este trabajo he adquirido muchos conocimientos, de la empresa gasífera, cómo esta estructurada una gran una empresa y como es la administración pública; pero no me veo haciendo esto por más 30 años.

En esta empresa estuve 6 años y medio. Fue una buena experiencia, me gustaba lo que hacía, el ambiente de trabajo era agradable. Pero solo que en el fondo sentía que no era lo mío.

Por lo que paralelamente junto con mi novio, ahora mi esposo; iniciamos todo lo que fue el papeleo de registrar una empresa propia.

Meses después ya tenía la empresa, y así nace Inversiones 0272 C.A. Ahora que hacer…Renuncio?. Si o no. Mi empresa aun no producía…

Pero el tiempo de Dios es perfecto. En este momento quede embarazada, y fue la fuerza o el empujón que necesitaba.

Durante el embarazo prácticamente trabajaba el doble, seguía en la empresa y al salir de allí me dedicaba a las publicaciones y ventas por internet.

Tenemos la idea que con una empresa propia vas a estar más relajado, y no es así. O por lo menos no cuando estas iniciando. Requiere dedicación, atención, y esmero.

Con menos de un mes mi bebe y yo salíamos juntas a trabajar a la oficina que habíamos habilitado con todo lo necesario para llevar el negocio.

Y fue así, cuando llego el momento, luego del permiso post natal cuando me tocaba reintegrarme que renuncie.

Y si, en ese momento trabajaba mucho más que en mi antiguo trabajo. Pero me daba mucho más satisfacción y lo hacía con gran gusto, era mi negocio propio y lo demás no importaba. Lo que hacia me apasionaba.

Hoy en día puedo decirte, fue la mejor decisión de mi vida!... El construir e ir moldeando un negocio que te llene verdaderamente.

Y en mi caso, lo más importante fue tener el tiempo y la dedicación de cuidar a mi hija. Tenerla a mi lado cada momento, y que ella sienta que estoy allí para ella, eso no tiene precio.